Cyberencono / Relato sobre narcisitas virtuales
Es más fácil expresar los sentimientos y frustraciones detrás de una pantalla. Al cabo nadie se entera quien eres, cómo te llamas, no necesitas preocuparte por tu reputación ni por las represalias a las que podías hacerte acreedor por tus conductas en la vida real (acá lo peor es que el administrador de algún foro te bloqueé).
Me llama la atención y creo que sería algo que merecería un profundo análisis psicológico. Y por lo que veo en México son mucho más comunes los trolls o la gente que utiliza las redes sociales para sacar sus frustraciones que la que existe en otros países. Sí, la política es el tema de lo que más se alimentan este tipo de personas. Este tema es muy preocupante (ya no solo a nivel virtual sino a nivel real) y es que existe un encono, un odio irracional. Es cierto y es totalmente natural que la población muestre su repudio, se manifieste en contra de algún personaje y exprese su enojo ante cierta situación (tampoco se trata de irse al otro extremo), pero es cierto también que para muchas personas es pan de cada día atacar a aquella facción política (gobiernos, políticos, partidos) como si estas determinaran totalmente su vida y creyeran que les irá mejor en función de lo que haga el gobierno, y no de lo que ellos mismos pueden hacer.
Por ejemplo, esas batallas irracionales que se pueden ver en algunos foros entre los seguidores de Peña y los de López Obrador cancelan cualquier capacidad de razonamiento. Se vuelve una batalla dogmática, donde el fin principal es descalificar al otro, minimizarlo, “destruir” su punto de vista. En muchas ocasiones esto termina en persecusiones (que de no haber mucho cuidado en la privacidad virtual podría extenderse hacia lo real) e incluso en cyberbullying.
Este tipo de gente, que a la vista de muchos son considerados como trolls, tienen un perfil narcisita, egocentrista, y en casos extremos se puede presentar algún delirio de grandeza (varios de ellos pueden presumir de ser genios intelectuales). Este tipo de personas son intelectualmente deshonestas y contradictorias. Este tipo de personas no busca la verdad objetiva, sino ganar la discusión. Tampoco se da el tiempo de reflexionar. Suele falsificar, tergiversar, insultar, intimidar. Este tipo de personas se quiere mostrar superior a los demás participantes y son vengativos.
Estos “trolls” que muchas veces emanan de un caldo de cultivo generado por una sociedad como la nuestra, poco acostumbrada a la tolerancia, no pueden tolerar la duda y se refugian en el dogma. A pesar de mostrarse “intelectualmente superiores y diferentes”, a veces actúan en masa cuando se publica un video en Youtube o un artículo en algún diario para sacar sus frustraciones diarias y descalificar automáticamente a aquellos que “no piensan igual que ellos”.
Este tipo de personas tienen trastornos emocionales, porque no me pregunto como esta gente tiene incluso tiempo para descalificar obsesivamente tanto a políticos (Peña, AMLO), u otras cosas (inclusive batallas como esa de Apple vs Android) y a la vez buscan descalificar y hasta humillar a aquellos que no piensen como ellos. Me pregunto si este tipo de gente tendrá vida propia. Si tendrán los suficientes amigos como para no depender de una figura virtual.